“VLADY: REVOLUCIÓN Y DISIDENCIA” LLEGA A SAN ILDEFONSO PARA CELEBRAR 100 AÑOS DEL MURALISMO EN MÉXICO
SC/CPDC/287-22
● Este esfuerzo del Centro Vlady de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México expone más de 300 obras, entre pinturas, murales, dibujos y bocetos, del artista ruso-mexicano Vladimir Kibalchich Rusakov.
● La exposición celebra el centenario del artista en 2020, sin embargo, por la pandemia se atrasó hasta 2022, que afortunadamente coincide con los 100 años del muralismo, cuyo epicentro se encuentra precisamente en San Ildefonso.
A partir de este 9 de septiembre de 2022 y hasta el 30 de abril de 2023, el Antiguo Colegio de San Ildefonso expondrá “Vlady. Revolución y Disidencia”, muestra con más de 300 obras del artista de origen ruso Vladimir Kibalchich Rusakov, la más completa exposición del pintor participante de La Ruptura y reinventor del muralismo mexicano.
Para hacer esta exposición posible participaron la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Secretaría de Cultura Federal y el Gobierno de la Ciudad de México, a través de su Secretaría de Cultura, instituciones mandantes del Colegio de San Ildefonso, en colaboración estrecha con la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) a través del Centro Vlady, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), y el Archivo General de la Nación.
Claudia Curiel de Icaza, secretaria de Cultura capitalina en representación de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, encabezó la inauguración y reconoció la importancia de “Vlady”, como era conocido, por su “coherencia política, su preocupación social y el espíritu revolucionario en su constante disidencia”.
Y sobre México, celebró que “siempre ha sido un espacio importante para refugiados que han nutrido la historia de nuestra cultura. Por eso estoy muy contenta de celebrar aquí esta exposición en el marco de los cien años del muralismo”, expresó la funcionaria.
Por su parte, Mariana Munguía Matute, coordinadora Nacional de Artes Visuales del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), en representación de la secretaria de Cultura Federal Alejandra Frausto Guerrero, aseguró que esta exposición “permitirá a la comunidad cultural acercarse a este artista cuya enérgica actividad interior lo llevó a desarrollar una obra llena de alegorías y símbolos con profunda resonancia estética, política y social”.
El Centro Vlady de la UACM y los curadores Araceli Ramírez y Claudio Albertani, así como Óscar Molina Palestina del Centro de Enseñanza Para Extranjeros de la UNAM, fueron quienes concibieron esta exposición y la propusieron al Mandato del Colegio de San Ildefonso, financiando la investigación y curaduría, así como el préstamo, traslado y seguro de más de 200 obras y cuadernos personales del artista.
Eduardo Vázquez Martín, coordinador Ejecutivo del Mandato Colegio de San Ildefonso, indicó que esta muestra estaba pensada originalmente para celebrar en 2020 el centenario de “Vlady”, pero por la pandemia se tuvo que retrasar su montaje.
Sin embargo, el hecho de que pueda ver la luz finalmente en 2022 coincide perfectamente con el contexto de los 100 años del muralismo en México, por lo que representa un gran festejo también para San Ildefonso, considerado el epicentro de este movimiento pictórico.
Fernando Gálvez, responsable del Centro Vlady, calificó al artista como uno de los “inmensos maestros del arte mexicano y universal, gran pintor, dibujante y grabador. El dibujante más interesante del siglo XX mexicano a la par de Francisco Toledo y José Luis Cuevas”.
Sobre el nombre de la exposición “Revolución y Disidencia”, Gálvez destacó primero el carácter político del artista, no solo por haber nacido en el vientre mismo de la Revolución Rusa, sino también por haber tenido como uno de sus temas predilectos las revoluciones latinoamericanas y las luchas sociales.
Sobre la disidencia, reconoció de “Vlady” su capacidad de criticar, objetar y rechazar la doctrina oficial, siendo disidente primero al pertenecer al movimiento conocido como “La Ruptura” que congregaba a artistas mexicanos y extranjeros radicados en México, que en la década de los 50 se opusieron a seguir la corriente Escuela Mexicana de Pintura, que consideraban gastada.
Para luego ser nuevamente disidente al separarse de este movimiento y tomar un camino propio para reforzar su estilo en el que tiene cabida el surrealismo y expresionismo, con el que defiende la premisa de que “ninguna de las discusiones (políticas y sociales) tendría sentido si no fueran acompañadas de la maestría artística y estética”, indicó Gálvez.
Araceli Ramírez, curadora de la exposición, aseguró que no se trata de un recuento de la larga carrera del artista, sino que tiene sus obras más importantes en las que se puede admirar su proceso creativo en el contexto histórico y personal.
“Son importantes sus diarios (más de 200 cuadernos en el poder del Centro Vlady), que están llenos de bocetos y anotaciones que sirven para reflexionar sobre su visión política, pero también sobre sus preocupaciones más íntimas y personales. Y a través de los cuales hemos podido aprender más de su iconografía”, dijo Ramírez.
Claudio Albertani, también curador de la exposición y que fue amigo cercano del artista, expresó que esta muestra es el resumen del trabajo y las investigaciones de más de 15 años en el Centro Vlady, “pretende desentrañar el sentido profundo, los fantasmas, las inquietudes, los ejes y por tanto la iconografía compleja llena de símbolos y casi imposible de descifrar, pero que gracias a los diarios se pudo conseguir”.
Finalmente, Óscar Molina, quien también participó como curador desde la UNAM, dijo que la exposición tiene dos objetivos: el primero es acercar al público joven a hablar y adentrarse en los temas centrales de la obra de “Vlady”, pues “la revolución y la disidencia representan a los movimientos contemporáneos”; y segundo para reposicionarlo dentro de la historia del arte mexicano.
Vladimir Kibalchich Rusakov (Petrogrado, 1920 – Cuernavaca, 2005), mejor conocido como “Vlady”, perteneció a diferentes mundos y a varias épocas: al siglo XX, en primer lugar, pero también al XIX, por la herencia familiar (su padre fue el escritor Víctor Serge, perseguido por el estalinismo).
Fue sucesivamente figurativo, abstracto y luego otra vez figurativo, sin dejar de tener un toque surrealista. Experimentó mucho, usó todas las técnicas a su alcance, fabricó sus propios colores, devoró volúmenes de literatura sobre arte y caminó kilómetros de museos en tres continentes.
La exposición muestra el trabajo introspectivo del artista ruso-mexicano y revela el proceso creativo de una obra original, repleta de alegorías, símbolos que requieren descifrarse. Se compone de lienzos de gran formato y obras nunca exhibidas o poco conocidas, junto a cuadernos, bocetos y dibujos, en gran parte pertenecientes al acervo del Centro Vlady.
La exposición está dividida en cinco ejes que recorren mil 103 metros cuadrados de siete salas del Antiguo Colegio de San Ildefonso; el primero es el que da nombre a la exposición “Revolución y Disidencia” en el que se muestra esa etapa de la vida “Vlady” antes de decidir convertirse en artista con los primeros dibujos que hizo cuando tenía siete años y otros de su madurez entre los que destacan bocetos de las manos de su padre en su lecho de muerte.
En este primer eje también se observan trabajos que a lo largo de su vida se centraron en la revolución rusa y las revoluciones latinoamericanas; uno de ellos “Descendimiento y ascensión”, una obra que le encargó la Secretaría de Gobernación (SEGOB) en 1993 que debía tener como tema “Las revoluciones permanentes” y que cuando surgió el movimiento zapatista en 1994, “Vlady” cubrió con una capucha el rostro de una mujer.
Ese cuadro fue conocido como “La rockera zapatista”, mismo que fue retirado un día después de su inauguración en la SEGOB y permaneció por muchos años en una sala de juntas del Archivo General de la Nación; actualmente se encuentra en la entrada del área de consulta.
Los curadores de la exposición hicieron un llamado para que los asistentes pongan especial atención a las vitrinas en las que se exponen los diarios y cuadernos del artista, pues en ellos se evidencian algunos bocetos de sus obras que al final tuvieron otro resultado, como es el caso de “La rockera zapatista” que en principio fue concebida de otra forma.
El segundo eje es “Vlady Íntimo”, que en su recorrido nos deja ver más sobre su padre y el peso que tuvo en su vida la locura de su madre, quien incluso fue internada en una institución psiquiátrica; además en este se exhiben algunas obras eróticas y varios autorretratos que nos adentran a la forma en la que él mismo se veía.
“Pasiones Artísticas” es el nombre del tercer eje de la exposición, en el que predominan las influencias que tuvo y como pasó de imitarlas a interpretarlas, para finalmente transformarlas a un estilo propio.
En esta parte están los únicos dos cuadros que no pertenecen a “Vlady”, sino a dos artistas que se inspiraron en él, así como él se inspiró en otros, para formar su estilo: Roberto Rébora y Jair Laiter.
El cuarto tema se titula “Muralista”, que como su nombre lo indica es la etapa de su carrera dedicada al uso del espacio público para la expresión artística, que es una de las cosas que le atrajo de México; por la dificultad de exponer murales, en esta sección se muestran bocetos y fotografías, pero además se proyectarán los murales en tamaño real para una mejor apreciación.
Finalmente se encuentra “Violencia y Poder”, el eje que conjunta sus obras dedicadas a uno de los temas que más le interesaban: las contradicciones humanas como el amor y el odio, la paz y la guerra, que yuxtaponía en sus pinturas y dibujos.
Además se trata de la materialización de la concepción trágica de “Vlady” sobre el terror, los asesinatos y el totalitarismo, que eran temas que lo preocupaban y consternaban.
Así, este recorrido hará al público testigo de las diferentes etapas artísticas, motivaciones, aspiraciones y frustraciones, así como algunos pasajes biográficos de este reconocido creador.
La exposición estará abierta del 9 de septiembre de 2022 al 30 de abril de 2023 en el Antiguo Colegio de San Ildefonso ubicado en Justo Sierra 16, Centro Histórico de la Ciudad de México. Horario: martes a domingo de 11:00 a 17:30 horas. Informes en la página de Internet: (www.sanildefonso.org.mx).
Los contenidos de esta exposición pueden consultarse en el sitio web: (https://vlady-revolucion-y-disidencia.uacm.edu.mx/) .
Las actividades de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México se pueden conocer en su página oficial (https://cultura.cdmx.gob.mx/), en la Cartelera Cultural de la Ciudad de México y a través de sus redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.