Exhibe el Museo de la Ciudad de México fotos de los alter-egos icónicos de David Bowie

SC/DDC/CP/1082-16 Ciudad de México, 16 de Diciembre de 2016
-
El nacimiento de Ziggy Stardust, Aladdin Sane y Scary Monsters puede ser visto a partir de este viernes 16 de diciembre a través de 42 fotografías que integran la muestra Duffy/Bowie: Five Sessions
-
Las imágenes ilustran el desarrollo y el proceso creativo llevado hasta el límite durante ocho años y cinco sesiones trabajadas entre el músico británico y el fotógrafo Brian Duffy
- El montaje es resultado de la colaboración entre el Museo de la Ciudad de México de la Secretaría de Cultura capitalina y BLK MRKT (Black Market), que por primera vez trae a México material del Archivo de Brian Duffy
Aladdin Sane, portada del álbum que lanzara David Bowie en 1973, es catalogada como la imagen que definió la estética del músico británico durante toda su carrera y actualmente resulta la más conocida alrededor del mundo, bajo el nombre de “La Monalisa del Pop”. La misma es sólo una de las 42 fotografías realizadas por el artista Brian Duffy que pueden ser vistas en el Museo de la Ciudad de México a partir de este viernes 16 de diciembre y hasta el 29 de enero de 2017.
La exposición Duffy/Bowie: Five Sessions es una colección de cinco sesiones fotográficas realizadas durante ocho años, que ilustran el desarrollo y el proceso creativo de Ziggy Stardust, Aladdin Sane y Scary Monsters, alter egos icónicos que catapultaron la imagen de la estrella de rock David Bowie, y en los que la visión estética del fotógrafo de tintes eclécticos e innovadores Brian Duffy fue esencial. Además, la muestra se nutre con dos sesiones fotográficas más tituladas Thin White Duke, Lodger y algunos retratos íntimos del autor de canciones como Space Oddity y Heroes.
El montaje es resultado de la colaboración entre el Museo de la Ciudad de México, perteneciente a la Secretaría de Cultura capitalina, y BLK MRKT (Black Market), que por primera vez trae a México y a América Latina material del Archivo de Brian Duffy en una curaduría del fundador del sello británico BLKT MRKT, Rene Gelston, el cual se exhibió en meses anteriores en las ciudades de Monterrey y Guadalajara, para concluir en diciembre su gira en la Ciudad de México. La empresa BLK MRKT ha declarado que seguirá trayendo a la capital exhibiciones que conjunten cultura y música para el próximo año.
Alter-egos conforman secciones de la muestra
Durante las sesiones que realizó Duffy, logró capturar algunas de las imágenes más conocidas de la carrera de Bowie —una de las más importantes figuras de la música a nivel mundial durante varias décadas, fallecido en enero de 2016—, en un momento en el que ambos estaban en una de sus etapas más creativas.
Por un lado, posa la figura andrógina y de otro mundo de Ziggy Stardust, personaje con el cual Bowie hizo su primera transformación en agosto de 1972, resultando el primer experimento de un estilo e imagen camaleónico que lo definiría durante toda su carrera musical. En este sentido, la primera sección de la muestra resulta el encuentro entre dos creativos que se reconocieron uno al otro.
Tony Defries, mánager de Bowie, había conocido a Duffy en su búsqueda para retratar a David cuando éste tenía numerosas presentaciones en vivo, contaba con una apretada agenda de televisión y radio, y estaba en la producción de un nuevo álbum (Aladdin Sane). Duffy captó en su estudio en Londres el mejor look del artista; David diseñó el traje de Ziggy con Freddie Burretti y usó la guitarra roja brillante Vox como accesorio.
Un año después, en 1973, vendría la sesión de fotos de Aladdin Sane. Tony Defries nuevamente eligió a Duffy para la portada del siguiente álbum de David, para quien aportaría un toque especial a la sesión que el propio Bowie había pensado para rendir homenaje a Elvis Presley, representando el símbolo del rayo sobre el avión privado del cantante de rock and roll al incorporarlo como un relámpago en la portada.
Así, Duffy se inspiró en un relámpago rojo y azul que vio en una olla de arroz en la cocina y pidió que el artista de maquillaje Pierre La Roche lo replicara en la cara de David. Sin embargo, el fotógrafo quedó insatisfecho, tomó el kit de maquillaje y dibujó un esquema más dramático en la cara de David Bowie. El resultado fue excepcional, convirtiéndose la cubierta del álbum “La Monalisa del Pop” en la más recordada por los fans del artista británico.
Ya para julio de 1975, al realizar la tercera sesión Thin White Duke, Duffy y David se habían convertido en buenos amigos. Fue entonces cuando el Sunday Times Magazine comisionó a Duffy para fotografiar a David en el set de filmación de El hombre que cayó a la Tierra (1976) en Nuevo México, Estados Unidos, donde David hizo el papel de un extraterrestre en la película británica de ciencia ficción basada en la novela del mismo título de Walter Tevis.
Lo peculiar en esta serie de fotografías recae en los espectaculares paisajes logrados por un arribo tardío del autor, al momento en que el sol se ocultaba y había poco tiempo para capturar imágenes de Bowie y su imagen de otro mundo. El efecto del Starman jugando con la arena se logró con un sistema de iluminación experimental y exposición múltiple.
Como lo dice su nombre, para la sesión de The Lodger de febrero de 1979, David Bowie se convertía en “El Huésped” que buscaba desarrollar la imagen de un “hombre en caída”. Brian era bien conocido por su capacidad técnica, adquirida trabajando en numerosos sets de publicidad y fácilmente resolvió el problema de hacer que David apareciera como un hombre que cae a través del aire, al elevarlo desde el fondo.
Por último se realizó la sesión de Scary Monsters, en abril de 1980. Si bien para aquél entonces Duffy ya se había retirado de la fotografía, David logró convencerlo para hacer un rodaje final que resultaría en Bowie vestido de “el payaso más bello en el circo" que no escapó de esa imagen extraña que siempre definió al artista de muchas generaciones.
Duffy comenzó su carrera fotográfica en 1957, trabajando para la revista de moda Vogue y a lo largo de la década de 1960, junto con David Bailey y Terence Donovan, fue uno de los artistas de la lente más célebres de Londres. Era un fotógrafo ecléctico e innovador y entre sus diversos registros se dedicó a la moda, al retrato y la publicidad, aunque es más recordado por sus colaboraciones con Bowie.
En su trabajo, Duffy supo captar de manera única la esencia de muchos íconos de la moda, música y cine de los años 60. Al respecto, existen testimonios memorables que afortunadamente se pueden apreciar gracias al valioso trabajo de su hijo Chris, quien se ha encargado de reunir material para formar un archivo que le rinde homenaje a la lente de una de las personalidades más influyentes en la historia de la fotografía.
La exposición Duffy/Bowie: Five sessions podrá verse hasta el domingo 29 de enero de 2017. El Museo de la Ciudad de México se ubica en José María Pino Suárez número 30, Centro Histórico. El recinto abre de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas, y permanece cerrado los días lunes. La entrada tiene un costo de 28 pesos; miércoles entrada libre.
Para conocer la cartelera completa de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, visite http://www.cultura.cdmx.gob.mx/ y en redes sociales a través de @CulturaCDMX, con los hashtags #soycultura y #SomosCultura.
--o0o--